EL PASADO NOS PERSIGUE

Peter Hartmann, Director CODEFF Aisén, Presidente Agrupación Aisén Reserva de Vida.
Seguramente no soy el único a quien a veces el pasado se le reaparece de una u otra forma. Eso, en ocasiones en forma de pesadilla de prueba de matemáticas en la universidad, de estres de campaña, de trauma infantil, de algún mal rato o desavenencia.   Y también hay apariciones mas gratas, como cuando nos encontramos o nos visita algún amigo y vecino de la infancia o juventud o como cuando sistematizamos nuestras aventuras del Aisén Reserva de Vida en el libro respectivo o recordamos proezas de las épicas campañas “No Alumysa” o “Patagonia sin Represas” o del montañismo. También, cuando conversamos con una joven antropóloga quien pretende hacer un mapeo de problemas y conflictos socio ambientales y nos hace sacar de los archivos el “Diagnóstico de la Situación Ecológica de la XI Región de Aysén” de 1989 y  la lista de “Problemas Ambientales XI Región”  trabajo participativo “Medio Ambiente Región y Comunidad Local” de la Comisión Nacional del Medio Ambiente de 1991. Va a estar interesante comparar y ver si estamos mejor. Para remate, me encuentro leyendo al fín , después de años de hojear el libro, la crónica sobre vida y obra de mi bisabuelo escultor  Thomas Buscher y su hermano, también escultor Clemens.
Y entre estas apariciones del pasado, con bastante emoción nos encontramos la semana anterior viendo el documental “Lawka” estrenado en Coyhaique por Gabriel Benoit, gestor y protagonista del film. Este documental muestra las bellezas y valores del Parque Nacional Lauca, reclasificado durante la dictadura en, un remanente del parque, el Monumento Natural Surire y la Reserva Nacional Las Vicuñas. Además de lo hermoso de estas “áreas silvestres protegidas” también se muestra el despoblamiento del altiplano y las consecuencias de la minería actual y abandonada. ¡Si, minería dentro de áreas “protegidas” del ex parque. Minería, con cientos de camiones trasladando bórax, pasivos de la minera Choquelimpie contaminando el rio, y depósitos de pasivos contaminantes importados desde Suecia. Junto con indignarnos con esa realidad (y recordar el también excelente documental “Surire “), la que por desgracia es demasiado común y normal en nuestro país, “Lawka” también nos hizo recordar el cuándo nos iniciamos de activista ambiental, por allá en 1982-83. En ese entonces el MOP proyectaba sacar bombeando el agua del Lago Chungará, en pleno Parque Nacional, para regar una plantación de tomates en el Valle de Azapa y de paso aumentar el caudal en la central hidroeléctrica de Chapiquiña y la infiltración de agua a la napa de la cual saca su agua potable Arica. En nuestras investigaciones, descubrimos que a su vez,  el predio de los tomates era de un amigo del intendente para ser vendidos en invierno a Santiago (¿de dónde cree que salen los tomates que compra en invierno?), que el mayor problema ambiental de Arica era la contaminación de su mar de balneario con alcantarillado (que bien se podría reciclar), que por ahí sobra energía solar y eólica, que el aire de Arica está cargado de polvo minero con plomo y que en Azapa se usa pesticidas a destajo (que seguramente luego se infiltran al agua potable). También descubrimos que las aguas del Chungará se filtran hacia las Lagunas Cotacotani y el bofedal de Parinacota (que corrían riesgo de desaparecer), que en el Chungará había varias especies endémicas y en peligro de extinción. Y que el gobierno militar por razones geopolíticas (desconfianza en los Aimaras ) propugnaba el despoblamiento del altiplano, a lo que se suma que el agua potable de las ciudades de la costa proviene de ese lugar, secando los bofedales y reduciendo  el área de pastoreo.  Además descubrimos al abogado Fernando Dougnac  (hijo del aisenino Juan Dougnac) quien estaba defendiendo a otra comunidad Aimara contra una minera (ver “Y es Nuestra”, con Illapu), y quien patrocinado por CODEFF  llegó hasta la Corte Suprema parando ese nefasto y mortífero proyecto y salvando al Chungará. Victoria no menor. De ahí, por lo demás Dougnac  fundó FIMA. Por cierto, que ya conocía y había alucinado con el sector de Parinacota, Cotacotani y Chungará y también había estado en Visviri, mas al norte, de lo que escribí un artículo para la Revista del Domingo.
No deja de llamar la atención y no dejan de haber similitudes entre lo que ocurría en el pasado y hoy en el Lauca/RN Vicuñas/MN Surire, ni entre lo que ocurre en el extremo norte del país y nuestra región.  Por lo demás, acá también hubo “reclasificación” de áreas silvestres protegidas y entre otras, se transformó la Reserva Lago Gral. Carrera a RN Jeinimeini y terrenos fiscales aptos para la minería. Y también, en lo que significan para nuestro país  las áreas silvestres protegidas y el patrimonio natural y cultural, para el cual parecen no tener mayor importancia, mientras la minería destructiva sí. La diferencia tal vez sea, que ahora no le podemos echar la culpa a la dictadura.

Compartir: